miércoles, 29 de septiembre de 2010

La suerte

Sangre

Como voy a poner mi mente en blanco si cierro los ojos y lo veo todo negro

Son las dos de la mañana, pero sé que por la noche las palabras hacen magia...
Era una de esas noches de insomnio, pero igualmente tu y yo coincidimos.
Yo nunca me habría fijado en ti, solo quería coger sin pedir lo que necesitaba y ni si quiera mostrarte agradecimiento.
Pero la puta casualidad no me dejo pasar desapercibida contigo y me inundaste con tu energía. quien iba a negarse estando bajo mínimos.
A pesar de compartir ciudad en varias ocasiones solo una noche cruzamos miradas y pude entender que el calor que buscaba no estaba contigo, aunque tu ardías y yo vi ese fuego rojo.
Me manche la ropa y volví a casa.
No recuerdo que paso después pero ahora se que las manchas de vino se van mal.